Gestión del Agua

El sector hídrico es muy sensible al clima y está estrechamente relacionado con otras esferas prioritarias. La protección y gestión del agua haciendo uso de información climática es fundamental para mejorar la seguridad alimentaria en las zonas de regadío y de secano, reducir el riesgo de las enfermedades transmitidas por el agua y mejorar el saneamiento. Dado que las condiciones extremas en cuanto a la disponibilidad de agua (crecidas y sequía) son unos de los principales factores que contribuyen a los desastres, y a las pérdidas de vidas y daños conexos, el agua también guarda relación con la reducción de riesgos de desastre. La seguridad hídrica es una preocupación mundial que se ve acentuada por la vulnerabilidad del agua al cambio climático.